Algo fue verdad

 

 

Un personaje real o imaginario, una anécdota, incluso una frase, pueden dar lugar a unahistoria. Una casa en ruinas, un pueblo semiabandonado, un bosque, la terraza de un bar en verano, incluso una oficina, cualquier escenario puede servir de base para comenzar una historia.

En “Algo fue verdad” se recogen cinco relatos en los que las protagonistas observan, realizan o sueñan esas historias: la abnegada trabajadora y ama de casa, la que anhela vivir en el bosque junto al ser que ama, la valiente maestra que lucha por conseguir una quimera, o las que simplemente miran, sin pretender intervernir y que, precisamente por eso, se convierten en cómplices.